domingo, 21 de febrero de 2010

Introspección III: las malditas horas


Entre las cuestiones iniciales sobre las que deberíamos pensar una vez que empezamos a estudiar el PIR, está la siempre controvertida cuestión de las horas. ¿Cuánto tiempo me pongo? ¿Empiezo poco a poco o me meto a tope desde el principio? ¿Mientras más horas mejor, siempre?

Yo empecé contando las horas como medio para motivarme. Además, participaba en el hilo de fichaje, que ha sido un gran apoyo para mí durante todo el estudio. Empecé estudiando unas seis horas y me mantuve en siete o siete y pico hasta noviembre. Ahí intenté subir a ocho, pero rara vez lo conseguía sin agotarme. En diciembre, cuando me encerré en casa y cambié mi método de estudio, bajé a cinco-seis horas y así me mantuve hasta enero. Es decir, que cuando todo el mundo andaba metiéndose jornadas de diez y doce horas, yo estudiaba menos (en tiempo) que nadie pero más (en rendimiento) que nunca. Para que os hagáis una idea, llegué a leerme Clínica I de Estrella, que creo recordar que son más de 300 páginas, en dos horas. Cuando pienso que en la primera vuelta que le di tardé dos semanas, me doy cuenta de lo muchísimo que he progresado a lo largo del camino PIR.

[Por supuesto, esto está matizado por el hecho de que al final tenía el libro muy masticado, pero no quita que hiciera muchísimos progresos en lectura rápida. Ya os contaré]

Contar las horas no es malo. Nos da feedback y nos asegura que no nos dormimos en los laureles. Mi problema personal con las horas fue que cuando me proponía, por ejemplo, hacer ocho horas en un día, me pasaba lo siguiente:

1. Llegaba a la biblio tarareando mentalmente la canción del malo de Star Wars. Es que me daba energía positiva. Era la "marcha oposeitor".
2. Me sentaba, sacaba mis apuntes y ponía en marcha el crono.
3. Veía un 20 minutos que alguien se había dejado en la silla de al lado. Pensaba en parar el crono, pero me decía a mí misma "si total, hasta las ocho horas... ¿qué más da una propinilla?".
4. Empezaba a estudiar. A la hora estaba ya hasta el potorro, pero pensaba "si me levanto ahora, se me va a hacer larguísimo hasta rellenar las cuatro horas de la mañana, así que voy a pasear los ojos por la página para rellenar tiempo".
5. Se me ocurría un dibujo para una regla mnemotécnica y me ponía a colorearlo con los rotus de colores. Así al menos llenaba unos minutillos más.

Y así sucesivamente. A las siete horas y pico, en general, no podía más. Me forzaba a seguir hasta que no era capaz ni de leer las preguntas tipo test. Al final, dudo que aprovechara las ocho horas, y llegaba a mi casa con una sensación de tristeza y de desesperación muy desagradable.

Por supuesto, sé que habrá quien eche ocho horas y las aproveche. Yo no soy capaz. Cuando estudiaba cinco o seis horas, quedaba menos bonito en el crono pero me cundían desde el principio hasta el fin. Además, como estudiaba en intervalos de media hora (explicaré esto más adelante) me concentraba muchísimo y terminaba mucho más descansada.

Me he ido un poco por las ramas. Todo lo anterior lo cuento para ilustrar que, desde mi punto de vista, proponerse echar cada vez más horas no es un buen enfoque del estudio. Mi enfoque sería: echa un número de horas mínimo que puedas cumplir con comodidad y céntrate en aumentar tu rendimiento en esas horas. Mucho más motivante, agradable, descansado y beneficioso para tu vida social y tu bienestar psicológico.

[He aquí un cuentecito que ilustra muy bien, para mi gusto, el tema de la lucha con las horas.]

¿Cuánto es ese mínimo de horas al principio?

En mi experiencia, cinco o seis horas es un horario bastante cómodo. Permite terminar relativamente pronto (si te organizas bien y madrugas, a las siete puedes estar listo) y tener vida más allá del PIR, algo MUY importante para estudiar con la moral alta. Y en mi experiencia también, yo empezaría con esas 5 o seis horas desde el principio. Hay quien prefiere coger el estudio poco a poco, con una par de horas diarias, e ir ampliando. Personalmente, recomiendo empezar a ritmo moderado desde el comienzo. ¿Por qué?

- Supongamos que estás dedicándote exclusivamente a estudiar. Bueno, pues el PIR es tu trabajo, así que no te vas a morir por aguantar jornadas de seis horas cuando hay gente que se chupa ocho o diez en curros más exigentes. Recuerda: estás transformándote en oposeitor. Tu mutación empieza aquí.
- Es un horario cómodo. En serio. De nueve a una y de cuatro a ocho, por ejemplo, incluyendo descansos y la SS (Sagrada Siesta), te puedes permitir no madrugar mucho y tienes cuatro o cinco horas por la noche para hacer lo que quieras. Si te va madrugar o no duermes siesta, de ocho a una y de tres a seis y media o siete también es un horario estupendo que te deja media tarde libre. Ya quisieran los oficinistas.
- Creo que es mejor empezar fuerte, ir avanzando temario y poder darse más adelante un descanso completo (por ejemplo, de varios días) para recuperar fuerzas. Si empiezas estudiando dos horas, ¿en qué estás empleando las otras cuatro? Suponiendo, recordemos, que no trabajas o te dedicas a algo más aparte del PIR. Las dedicarás al ordenador, a ver series, a leer, a tus hobbies o a pasear. No es exactamente descansar, así que tu nivel de cansancio después de unas semanas no va a ser muy inferior al que tendrías si dedicas seis horas diarias a estudiar. Lo que pasa es que tendrás mucho menos camino andado y quizá no sea tan recomendable que te tomes varios días de descanso.
- Al empezar a estudiar estás fuerte. No acumules descanso cuando aún no lo necesitas. El descanso viene después del cansancio, es decir: si no estás cansado, aprovecha y dale duro. Tranquilízate a ti mismo: cuando estés cansado, podrás descansar sin culpabilidad y el tiempo que sea necesario.
- No vayas a remolque de tus habilidades; que sean ellas las que van a remolque de ti. Es decir, que si no te concentras, es necesario que aprendas a concentrarte, pero no hagas que esa falta de concentración decida por ti el tiempo que vas a dedicar al estudio. Sé ambicioso.

Nota para los que trabajan y estudian: yo no lo he hecho, así que, ¿qué consejos voy a dar? Sois unos máquinas y punto. Si tuviera que hacerlo, hoy por hoy, creo que mi recomendación sería: descansa. Mejor dos horas descansado que cuatro hecho polvo y a fuerza de café. Mi récord personal de diferencia de rendimiento entre estar cansada y descansada ha sido de cuatro veces más. Si esas dos horas te cunden como ocho, te merece más la pena descansar las otras dos.

En cualquier caso, como ya dije al principio, no aceptes nada que no compruebes que te resulta beneficioso. Si la perspectiva de estudiar cinco o seis horas te angustia tanto que te bloqueas, empieza por una hora. O por media. Lo importante al principio es ponerse en marcha, y cada uno debe empezar al máximo ritmo que le permita avanzar sin agobios.

Eso es todo por hoy, amigos. Mucho ánimo en el Largo Camino PIR.

PD: No he aguantado sin PC, lo confieso. Me ha podido la ansiedad pre-plaza. Pero estoy descansando los ojitos cada quince minutos y utilizando lágrima artificial. A ver qué tal así.

5 comentarios:

irne dijo...

"El hachero esforzado", ¡¡¡nooo!!! Es broma, en realidad me gusta ese cuento pero es que, ¡viene en la guía de estudio de Cede! (Guía de estudio por llamarla de alguna manera---> muñequito de vomitar). Además no sé de dónde vendrá el cuento originalmente pero me temo que está incluído en uno de esos libros de Jorge Bucay que tanta alergia me dan---> de nuevo, muñequito de vomitar.

Coñas aparte, me sigo identificando bastante con todo. 8 horas ha sido generalmente mi tope. 6 creo que se hacen muy llevaderas. 7 quizá era mi "moda" de horas estudiadas. No trabajo ni me dedico a nada que no sea el p*** pir, y de momento creo que me concederé otro año así. El caso es que ahora viene una pregunta interesante. Pongamos que es mejor tratar de aumentar el rendimiento que las horas. ¿Cómo aumentar el rendimiento? ¡Chan-chan! ¡Próximo capítulo!

P.D. Si acabas en Sevilla, aquí tienes una guía pa lo que quieras.¡Cervecitas incluídas! :D

Brujinus dijo...

Jajajaja ¡¡y yo que me creía que os iba a gustar el cuentecito!! A mí me había parecido tope simbólico e ilustrativo.

Pues nada, quien quiera que lo lea, y a quien le den alergia esas cosas, pues que pase :P Al menos yo no voy por ahí recopilando cuentos y editando libros, como cierto argentino un poco pasado de peso...

Lo de aumentar el rendimiento, no te preocupes, que ya se verá. Pero si lo piensas, es lógico. Si tú empiezas a aprender cualquier habilidad, ya sea tocar un instrumento, hacer footing o jugar a los bolos, mientras más practiques más se te dará y más renidimiento le sacarás. Estudiar es lo mismo. Incluso sin proponértelo, tu rendimiento irá aumentando. Proponiéndotelo, aumentará aún más, of course. Ya lo iremos viendo.

Gracias por el ofrecimiento sevillano ;) La verdad es que está ahí ahí entre mis primeras preferencias de plaza. Veremos qué tal se da la cosa...

Un abrazo.

Ro dijo...

Brujinus, las dos veces q estudié el pir ése era mi cuento modelo a seguir Wink Otra cosa es q luego a veces le hiciera caso y otras no, ya sabéis lo fácil q es dar consejos y lo difícil q es autoaplicárnoslos.

Respecto a lo q dices d q cuanto más estudias más rendimiento tienes aunq no te des cuenta, tengo un ejemplo ilustrativo: recuerdo q la 2ª vez q me presenté en serio (creo q fue ésa), esos Reyes le echaron a mi primo el Brain Training, y yo saqué mejor puntuación q nadie xq aplicaba reglas mnemotécnicas a todo y tenía una capacidad d absorción d la información en esos momentos q ya me gustaría tener ahora. Así q comprobado!

Ro

panfrito dijo...

Hola Brujinus!!!

soy panfrito (en el mundo-foro-pir, y esto ha quedado muy friki)... la página está genial, me parece una gran idea enlazar tu experiencia con técnicas de estudio y memoria. A todos nos puede venir muy bien!

Te quería preguntar una cosilla... veo que recomiendas estudiar por manuales a los que tenemos un mini-expediente. Yo tengo Estrella y la verdad es que este tema me preocupa bastante. Le comenté la duda a ella de "¿por qué XXXX me compré yo estos apuntes si luego tendré que mirar manuales?" y me contestó que con sus apuntes uno podía aprobar con tranquilidad. También he mirado el informe de esta última convocatoria, y yo creo que un 89% de las preguntas contestadas está bastante bien, no? Naturalmente, réstale errores y comeduras de coco en el examen, pero con una buena base y habiendo invertido horas en ellos, no veo por qué no.
¿Qué opinas?
Un saludo y felicidades de nuevo, por tu plaza y por tu blog!

Brujinus dijo...

¡Hola, Panfrito!

No te agobies. Si ya tienes los manuales de Estrella, dominarlos y aprendértelos bien, más las actualizaciones que te vaya mandando, ya va a ser lo suficientemente entretenido como para empezar, y es posible que te sirva para sacar la plaza.

El tema de los manuales es que con un bajo expediente necesitas abarcar el mayor número posible de información. Por definición, unos apuntes contienen menos información que un manual, por muy bien hechos que estén, y además traen ejemplos y algo de "paja" que te puede permitir contextualizar los conceptos e integrarlos mejor.

Por ejemplo, cuando yo estudiaba un día me dio por leerme los Marinos, porque me dejé los apuntes en casa y eran el único libropir que había en la biblioteca. Solamente el matiz personal que le da el autor al redactarlo, incluso por ejemplo con algunas opiniones críticas respecto a la fama de los tratamientos cognitivos, me sirvió para que se me quedasen mejor los tratamientos eficaces de la depresión.

Mi otro argumento a favor de los manuales es el empírico: las mejores notas las está sacando FOCO, y FOCO utiliza manuales. Pero vamos, que la número uno dice que estudió casi que sólo con CEDE y tiene una notaza, así que todo es posible.

Creo que si tienes Estrella, empieza por Estrella, sobre todo si es tu primera convocatoria. Cubre un alto porcentaje de preguntas y estoy segura de que va a seguir ampliando con lo que pueda caer de otros años. Además, si te das cuenta de que no es suficiente (que no estoy diciendo que no lo sea), siempre estás a tiempo de revisar manuales, pero con el avance de tiempo y comprensión que te dará haber estudiado bien los apuntes.

Por último, cuando Estrella saque la ampliación correspondiente a este año podrás ver cómo están contestadas sus preguntas en los manuales y si te parece que las recoge con suficiente claridad.

Un abrazo y ánimo.